Los Últimos Días de Terrorismo de Estado de Michelle Bachelet
A pocos días del término del gobierno Concertacionista de la presidenta social-fascista, Michelle Bachelet, se ha incrementado con más fuerza la represión en los territorios Mapuche en conflicto.
Conflicto histórico creado por el Estado Chileno a partir de su nacimiento, cuándo a espaldas de la Nación Mapuche, Bernardo O’Higgins conocido por los chilenos, como padre de la patria, a través de un sucio manejo, decreta la anexión del Territorio Mapuche a la Constitución chilena. Esto ocurre el año 1818, y sería el inicio del despojo legal a una Nación independiente y soberana.
Posteriormente, en 1881, el Estado chileno inicia la mal llamada Pacificación de la Araucanía, que no fue otra cosa que la invasión armada a Territorio Mapuche, la cual culminó con la masacre y el asesinato de mas de la mitad de su población. El resto fue arrinconado y sometido por la fuerza a través de la cruz y la espada a aceptar los postulados, cultura y religión del Estado chileno.
Así nace Chile. Usurpando, robando y asesinando. Así se produce el Genocidio y el despojo a una Nación Milenaria, que no pudieron vencer ayer y que hoy se alza en los brazos fuertes de una nueva generación, de hombres, mujeres y niños, que con mucho valor y dignidad, tratan de salvar el último respiro que les queda de ese hermoso sueño que significa reconstruir su Nación. Por eso es la importancia de la lucha hoy, y por eso la crueldad de los opresores.
Hoy la represión desatada contra las comunidades Mapuche ha sido brutal por parte de las fuerzas policiales chilenas, quiénes haciendo honor a su legado fascista se han ensañado con la población indefensa. Hombres, mujeres y niños tienen en su mente, y en su cuerpo, la marca del horror vivido en los allanamientos, los helicópteros, las tanquetas y los disparos a mansalva que hasta los más pequeños recibieron.
Cobardes, asesinos y ladrones, esa es su característica. Mercenarios a sueldo es su precio. Sirvientes del latifundio y el capital, obedientes perros de un gobierno infame que ha hecho de la corrupción, el asesinato, la persecución más extrema a los jóvenes, de los montajes, las cárceles y la tortura su Ley.
Nunca en la historia de Chile post-dictadura militar, un gobierno llego a niveles tan altos de militarización y terrorismo de Estado en contra de las comunidades Mapuche y su propia población.
La responsabilidad que le cabe al Estado Chileno y su representante máxima, la Presidenta Bachelet, en estos hechos racistas y fascistoides es grave, y no podrá ser borrada por las encuestas programas y corruptas que hace el gran capital neo-liberal; ni por la venia que le hacen los que se venden por un plato de lentejas, o un puesto en un proyecto de gobierno o comunitario. La muerte de los jóvenes Mapuches, Matías Catrileo Quezada de 22 años en enero del 2008, de Jaime Mendoza Collío de 24 años en agosto, de este año asesinados cobardemente por la espalda, y de Alex Lemun de solo 17 años, asesinado de un tiro en la cabeza en Noviembre del 2002 cuando Bachelet era Ministra de Defensa en el gobierno de otro corrupto, Ricardo Lagos, siempre estará presente en las comunidades Mapuches, y fuera de ella. Como no se podrá sacar el titulo que se gano: ASSESINA.
No hay leyes de última hora que valgan. No habrá disculpa que se le pueda dar a una Nación cuando se les arrebata y asesina a sus hijos tan cobarde y fríamente. Solo hay una solución, y es muy simple:
A pocos días del término del gobierno Concertacionista de la presidenta social-fascista, Michelle Bachelet, se ha incrementado con más fuerza la represión en los territorios Mapuche en conflicto.
Conflicto histórico creado por el Estado Chileno a partir de su nacimiento, cuándo a espaldas de la Nación Mapuche, Bernardo O’Higgins conocido por los chilenos, como padre de la patria, a través de un sucio manejo, decreta la anexión del Territorio Mapuche a la Constitución chilena. Esto ocurre el año 1818, y sería el inicio del despojo legal a una Nación independiente y soberana.
Posteriormente, en 1881, el Estado chileno inicia la mal llamada Pacificación de la Araucanía, que no fue otra cosa que la invasión armada a Territorio Mapuche, la cual culminó con la masacre y el asesinato de mas de la mitad de su población. El resto fue arrinconado y sometido por la fuerza a través de la cruz y la espada a aceptar los postulados, cultura y religión del Estado chileno.
Así nace Chile. Usurpando, robando y asesinando. Así se produce el Genocidio y el despojo a una Nación Milenaria, que no pudieron vencer ayer y que hoy se alza en los brazos fuertes de una nueva generación, de hombres, mujeres y niños, que con mucho valor y dignidad, tratan de salvar el último respiro que les queda de ese hermoso sueño que significa reconstruir su Nación. Por eso es la importancia de la lucha hoy, y por eso la crueldad de los opresores.
Hoy la represión desatada contra las comunidades Mapuche ha sido brutal por parte de las fuerzas policiales chilenas, quiénes haciendo honor a su legado fascista se han ensañado con la población indefensa. Hombres, mujeres y niños tienen en su mente, y en su cuerpo, la marca del horror vivido en los allanamientos, los helicópteros, las tanquetas y los disparos a mansalva que hasta los más pequeños recibieron.
Cobardes, asesinos y ladrones, esa es su característica. Mercenarios a sueldo es su precio. Sirvientes del latifundio y el capital, obedientes perros de un gobierno infame que ha hecho de la corrupción, el asesinato, la persecución más extrema a los jóvenes, de los montajes, las cárceles y la tortura su Ley.
Nunca en la historia de Chile post-dictadura militar, un gobierno llego a niveles tan altos de militarización y terrorismo de Estado en contra de las comunidades Mapuche y su propia población.
La responsabilidad que le cabe al Estado Chileno y su representante máxima, la Presidenta Bachelet, en estos hechos racistas y fascistoides es grave, y no podrá ser borrada por las encuestas programas y corruptas que hace el gran capital neo-liberal; ni por la venia que le hacen los que se venden por un plato de lentejas, o un puesto en un proyecto de gobierno o comunitario. La muerte de los jóvenes Mapuches, Matías Catrileo Quezada de 22 años en enero del 2008, de Jaime Mendoza Collío de 24 años en agosto, de este año asesinados cobardemente por la espalda, y de Alex Lemun de solo 17 años, asesinado de un tiro en la cabeza en Noviembre del 2002 cuando Bachelet era Ministra de Defensa en el gobierno de otro corrupto, Ricardo Lagos, siempre estará presente en las comunidades Mapuches, y fuera de ella. Como no se podrá sacar el titulo que se gano: ASSESINA.
No hay leyes de última hora que valgan. No habrá disculpa que se le pueda dar a una Nación cuando se les arrebata y asesina a sus hijos tan cobarde y fríamente. Solo hay una solución, y es muy simple:
¡FUERA DEL TERRITORIO MAPUCHE Y LIBERTAD A TOD@S L@S PRES@S POLITIC@S MAPUCHE!
¡CON LEMUN, CATRILEO, Y COLLIO - POR LA RECONSTRUCCIÓN, RECLAMACIÓN, Y LIBERACIÓN DE LA NACIÓN MAPUCHE!
¡NO AL BICENTENARIO EN TIERRA ROBADA MAPUCHE!
¡MARRICHIWEU!
¡WEUWAIÑ!
¡CON LEMUN, CATRILEO, Y COLLIO - POR LA RECONSTRUCCIÓN, RECLAMACIÓN, Y LIBERACIÓN DE LA NACIÓN MAPUCHE!
¡NO AL BICENTENARIO EN TIERRA ROBADA MAPUCHE!
¡MARRICHIWEU!
¡WEUWAIÑ!
The Women’s Coordinating Committee Chile-Canada
Email: wccc_98@hotmail.com
Email: wccc_98@hotmail.com
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