Contra el Oportunismo de Burgueses Alternativos Filo-Comunistas
A propósito del “Comunicado en relación con la muerte de Mauricio Morales y la campaña represiva contra el movimiento social radical en Santiago de Chile” firmado y difundido por un tal “proyecto de cooperación intelectual internacional “Lista de la Autonomía Proletaria”, planteamos que:
Frente a la descarada manifestación de “solidaridad” de sujetos de dudosa reputación, hay quienes abiertamente les solicitamos que pongan sus “recursos y colaboración” al servicio de su clase, cuando seamos miles quienes los ataquemos sin piedad y destruyamos su mundo feliz del capital y la comodidad.
No son justamente abogados alternativos, esposos de azafatas, ex -leninistas arrepentidos o desorientados militantes de masas los que nos ayudarán a destruir el estado y el capital, ni menos aún a resistir cotidianamente la crudeza de sus aparatos seguritarios. Al parecer la soledad en que se han sumido tras años de ser alejados de las organizaciones y núcleos comunistas y anarquistas, debido a sus prácticas detestables en lo político y lo personal, los llevan hoy a levantar una virtual plataforma de “comunistas” que repartidos por distintos espacios del globo, aprovechan la muerte de un amigo para justificar la represión.
Los intentos del estado por desarticular la acción social cotidiana y sistemática que han realizado diversos núcleos, colectivos, centros sociales y okupas, entre muchos otros, no es producto de la decisiva acción de ningún compa. Es producto siempre e indudablemente, de las estrategias del estado por criminalizar la protesta social y las formas de vida que intentan escapar de la lógica del capital y sus mercancías. La represión es herramienta básica de su aparato ideológico y sus diversas policías sus lacayos conscientes contra el proletariado. Pero probablemente estos sujetos “solidarios” que alzan hoy sus letras y recursos para apuntar la resistencia como gatilladora de la represión, no saben de lo que se está hablando, porque se encuentran absolutamente sumidos en sus mundos acomodados, al lado de sus patrones ideando prácticas antisindicales en su calidad de leguleyos o encerrados en sus departamentos llenos de discos y prensa crítica. Por favor, no ostenten las palabras anarquía y comunismo, que ya han sido bastantes denostadas por funestos personajes y experiencias A-históricas. Y no basta portar una bandera negra en un funeral para calmar la consciencia…
Las vidas cotidianas que sobreviven las imposiciones del capital son aquellas que permiten generar espacios de relaciones con lógicas antiautoritarias y fraternas, sostener las actividades sociales, difundir la destrucción como forma de construcción: movimiento es sólo movimiento real, no una masa de oprimidos encandilados por palabras elitistas y parafernálicas web alternativas.
El oportunismo de la burguesía culposa es siempre una herramienta aliada del capitalismo y sus estrategias de dominación. No utilizamos nombres no por cobardía, sino porque vuestras prácticas orientan sistemáticamente a la policía hacia nuestros espacios de resistencia…y no nos vamos a entregar sólo para darles el vano y narcisista placer de insultarnos.
Frente a la descarada manifestación de “solidaridad” de sujetos de dudosa reputación, hay quienes abiertamente les solicitamos que pongan sus “recursos y colaboración” al servicio de su clase, cuando seamos miles quienes los ataquemos sin piedad y destruyamos su mundo feliz del capital y la comodidad.
No son justamente abogados alternativos, esposos de azafatas, ex -leninistas arrepentidos o desorientados militantes de masas los que nos ayudarán a destruir el estado y el capital, ni menos aún a resistir cotidianamente la crudeza de sus aparatos seguritarios. Al parecer la soledad en que se han sumido tras años de ser alejados de las organizaciones y núcleos comunistas y anarquistas, debido a sus prácticas detestables en lo político y lo personal, los llevan hoy a levantar una virtual plataforma de “comunistas” que repartidos por distintos espacios del globo, aprovechan la muerte de un amigo para justificar la represión.
Los intentos del estado por desarticular la acción social cotidiana y sistemática que han realizado diversos núcleos, colectivos, centros sociales y okupas, entre muchos otros, no es producto de la decisiva acción de ningún compa. Es producto siempre e indudablemente, de las estrategias del estado por criminalizar la protesta social y las formas de vida que intentan escapar de la lógica del capital y sus mercancías. La represión es herramienta básica de su aparato ideológico y sus diversas policías sus lacayos conscientes contra el proletariado. Pero probablemente estos sujetos “solidarios” que alzan hoy sus letras y recursos para apuntar la resistencia como gatilladora de la represión, no saben de lo que se está hablando, porque se encuentran absolutamente sumidos en sus mundos acomodados, al lado de sus patrones ideando prácticas antisindicales en su calidad de leguleyos o encerrados en sus departamentos llenos de discos y prensa crítica. Por favor, no ostenten las palabras anarquía y comunismo, que ya han sido bastantes denostadas por funestos personajes y experiencias A-históricas. Y no basta portar una bandera negra en un funeral para calmar la consciencia…
Las vidas cotidianas que sobreviven las imposiciones del capital son aquellas que permiten generar espacios de relaciones con lógicas antiautoritarias y fraternas, sostener las actividades sociales, difundir la destrucción como forma de construcción: movimiento es sólo movimiento real, no una masa de oprimidos encandilados por palabras elitistas y parafernálicas web alternativas.
El oportunismo de la burguesía culposa es siempre una herramienta aliada del capitalismo y sus estrategias de dominación. No utilizamos nombres no por cobardía, sino porque vuestras prácticas orientan sistemáticamente a la policía hacia nuestros espacios de resistencia…y no nos vamos a entregar sólo para darles el vano y narcisista placer de insultarnos.
Resistencia para la destrucción…..
Maury, estai acá y sabemos donde siempre estuviste.
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